Es de sobra conocido que la guerra civil española comenzó en la calle de Fuencarral con el asesinato del teniente Castillo frente a la capilla de la Virgen de la Soledad, en la esquina con Augusto Figueroa.
Solo por este hecho, tan determinante para el comienzo de la guerra, nuestra calle ya quedaría, para siempre, vinculada a la historia de esta fratricida contienda, pero, además, sufrió muchas otras heridas, como consecuencia de obuses y bombardeos.
Impacto de obuses en un edificio próximo a la Telefónica |
La presencia en el comienzo de la calle del nuevo edificio de la Telefónica, convirtió este punto en objetivo clave para la artillería y la aviación de los sublevados, que asediaban la capital desde las cercanas Casa de Campo y Ciudad Universitaria.
Las consecuencias fueron, como era de esperar, un considerable número de impactos en el nuevo rascacielos y en los inmuebles cercanos, algunos de los cuales tuvieron que terminar siendo derruidos.
Pese a todo, la Telefónica, que desalojó muchas plantas para evitar riesgos humanos mayores, siguió ejerciendo como centro de comunicaciones durante todo el conflicto.
Los carteles que aparecen tras los refugiados no tienen desperdicio |
La estación de Metro de Gran Vía, como tantas otras de la red del ferrocarril suburbano, sirvió a los madrileños de eficaz refugio contra los bombardeos, tal como muy bien se recoge en algunos documentos gráficos de esos años.
Ver, en nuestros días, las fotografías de esa difícil época nos ayuda a valorar mejor la realidad que hoy vivimos, tan diferente de lo que fueron esos tres terribles años que, pese a todo, no consiguieron paralizar la intensa vida de la calle de Fuencarral ni, por supuesto de la 'Avenida de los Obuses', como se conocía popularmente (por motivos obvios) a la Gran Vía madrileña durante la guerra.
Gracias a las fotografías de Atienza y Juan Larrea podemos observar cómo los graves daños producidos en Fuencarral 9, acabaron siendo reparados y la casa presenta, hoy, el mismo aspecto que tenía en los años de la guerra.
Esta otra foto de Atienza nos muestra los estragos producidos en los números 6 y 8 de la calle de Fuencarral.
Ambos edificios tendrían que acabar siendo demolidos.
Llama la atención el gigante que aparece sobre la acera, a la derecha de la fotografía.
O es un curioso efecto visual o se trata de un hombre de asombrosa estatura...
Un tranvía alcanza la Gran Vía, junto a la casa Murga, en cuya fachada pueden apreciarse los efectos de los bombardeos, consecuencia de su proximidad con la Telefónica.
Regando la calzada de la Gran Vía, frente al protegido edificio de la Telefónica.
Al fondo, el comienzo de la calle de Fuencarral.
Mirando al cielo desde la esquina de la Telefónica con la calle de Fuencarral, pendientes de las evoluciones de la aviación del ejército nacional.
Unos muy bien apilados sacos terreros protegen una parte de la fachada de la Telefónica, junto a su entrada principal, tapada por un cartel que anuncia la película 'Tiempos Modernos', de Charlot.
Bajo el gran cartel de los cines Salamanca y Monumental, se ve asomar la palabra 'Rusia'...
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